A veces me siento tan increíblemente perdida, como si hubiera estado todo el día en el sol, imaginarán la calidez, la sensación en mi piel.
Siento que cerré mis ojos por un segundo y me robaron el sol y en su lugar está el frío glacial, mi piel reseca, mis mejillas y cuerpo adormilado.
Literal.
Me sentía... no bien, si no, estable. Me sentía estable y ahora repentinamente me siento molesta, lo noté hace rato, molesta, confundida. No quiero tragarme a nadie en absoluto.
A nadie excepto a quienes quiero.
La risa de mis mejores amigas me alivia de ese frío, incluso cuando no desaparece, se retracta con fácilidad, se olvida en la sombra de su luz.
Y no hay nada como las palabras de él. Cuando estoy con él, como esté, sé que el frío no desaparece, ni siquiera se retracta, sencillamente está ahí pero el me acepta con él y me abraza.
Repentinamente, el frío no me importa en absoluto.
martes, 8 de noviembre de 2011
domingo, 6 de noviembre de 2011
Respuestas no a elección, si no que te fueron elegidas.
Ayer me hacía una pregunta sobre una persona que pudiera amar todos mis defectos. Mis defectos en especial.
No sé ni porque me lo pregunto, yo he podido hacerlo, eso no lo hago solo por ignorar sus defectos, si no que los acepto y los considero una valiosa parte de alguien a quien quiero.
Pero alguien quería darme una respuesta.
Y me la dió con una pregunta:
Si el prójimo es el ajeno, el otro, que de alguna parte es un yo...
No sé donde estés, ni de que forma llegarás pero sé de tu existencia, de tu vida. No te sucederá nada dramático y te quedarás en el camino, en el algún punto, hemos de coincidir.
No sé ni porque me lo pregunto, yo he podido hacerlo, eso no lo hago solo por ignorar sus defectos, si no que los acepto y los considero una valiosa parte de alguien a quien quiero.
Pero alguien quería darme una respuesta.
Y me la dió con una pregunta:
¿Hay un fundamento a través del cual uno puede llevar a cabo su vida entera?
Si, el amor al prójimo.
Si el prójimo es el ajeno, el otro, que de alguna parte es un yo...
No sé donde estés, ni de que forma llegarás pero sé de tu existencia, de tu vida. No te sucederá nada dramático y te quedarás en el camino, en el algún punto, hemos de coincidir.
sábado, 5 de noviembre de 2011
Sometimes the answer is NO but other times, the answer is, NOT yet.
Hoy estaba considerandolo, repasando las palabras que había escuchado hacía unos días antes: alguien amará tus defectos, tus virtudes, tu forma de ser y le gustará más que a ti. Eso lo aseguro.
No sé como has podido 'asegurar' aquello.
¿Qué si en mi existen más vicios que virtudes?
No, realmente no tengo bases para no creerme esas palabras pero sencillamente me parece difícil creer en la existencia de una persona así.
No sé como has podido 'asegurar' aquello.
¿Qué si en mi existen más vicios que virtudes?
No, realmente no tengo bases para no creerme esas palabras pero sencillamente me parece difícil creer en la existencia de una persona así.
jueves, 3 de noviembre de 2011
It's about this itch only he can scratch.
Necesito volver a mi zona de comodidad. No, no me importa saber si no me he alejado demasiado, necesito volver a tener, a disfrutar de los efímeros detalles, los diminutos que me hacen reconocerme, los que evitan que me torne en un desconocido cualquiera.
La distancia te hace más daño a ti que a mi. A mi, me hace remarcarte mi rudeza, mi hostilidad. No sé como se interponen ambos, sentido y desequilibrio, en un conjunto incomprensible.
A ti, sencillamente te hace pensar que lo has perdido todo.
Por esa única razón comenzaré con aquello.
Parecería un detalle tan tonto que ni siquiera le presté atención pero tiene sentido. No, ¡enserio!, tiene sentido; sentido de pertenencia.
Jamás te he aclamado como mío, eres humano, mortal, con límites y barreras, virtudes y defectos pero debo recordarte, el saber esto no me quita las ganas de decirte que para mi, eres perfecto.
Cabe mencionar, me he desviado del tema principal, pertenencia.
Lo admito, por primera vez, el día anterior, tres o dos días atrás, tal vez, no sé, lo dije por primera vez: Te quiero y te quiero conmigo.
En todos los sentidos.
No me quebraré la cabeza cual niño buscando la forma de partir abierto un huevo de pascua sin herir el cascaron, hoy no.
Hoy lo acepté, que te deseo, te quiero y necesito conmigo y junto a mi.
¿Qué si podría dejarte ir? No sé, comprende, no es un tema de redundancia.
Sólo mi afecto, mi cariño ante tus ojos mielosos, incluso si es el único rasgo que me sé de memoria. Lástima pero mis dedos prometen recordarte por completo ante la primera oportunidad.
Tu fragancia, tus miradas, el sonido de tu risa. Lo recordaré, me negaré a olvidarlo al escucharlo, al mirarlo, al presenciarte de nuevo.
Pero hoy, tan sólo hoy conseguiré dormir de hacertelo saber, jamás consideré la posibilidad de esta embriagante sensación por quererte, conmigo y nada más.
La distancia te hace más daño a ti que a mi. A mi, me hace remarcarte mi rudeza, mi hostilidad. No sé como se interponen ambos, sentido y desequilibrio, en un conjunto incomprensible.
A ti, sencillamente te hace pensar que lo has perdido todo.
Por esa única razón comenzaré con aquello.
Parecería un detalle tan tonto que ni siquiera le presté atención pero tiene sentido. No, ¡enserio!, tiene sentido; sentido de pertenencia.
Jamás te he aclamado como mío, eres humano, mortal, con límites y barreras, virtudes y defectos pero debo recordarte, el saber esto no me quita las ganas de decirte que para mi, eres perfecto.
Cabe mencionar, me he desviado del tema principal, pertenencia.
Lo admito, por primera vez, el día anterior, tres o dos días atrás, tal vez, no sé, lo dije por primera vez: Te quiero y te quiero conmigo.
En todos los sentidos.
No me quebraré la cabeza cual niño buscando la forma de partir abierto un huevo de pascua sin herir el cascaron, hoy no.
Hoy lo acepté, que te deseo, te quiero y necesito conmigo y junto a mi.
¿Qué si podría dejarte ir? No sé, comprende, no es un tema de redundancia.
Sólo mi afecto, mi cariño ante tus ojos mielosos, incluso si es el único rasgo que me sé de memoria. Lástima pero mis dedos prometen recordarte por completo ante la primera oportunidad.
Tu fragancia, tus miradas, el sonido de tu risa. Lo recordaré, me negaré a olvidarlo al escucharlo, al mirarlo, al presenciarte de nuevo.
Pero hoy, tan sólo hoy conseguiré dormir de hacertelo saber, jamás consideré la posibilidad de esta embriagante sensación por quererte, conmigo y nada más.
Comeback.
No sé como pero estoy de vuelta, sin promesas, no sé si será temporal o permanente. Estoy aquí y le he hecho algunas remodelaciones al diseño, algo un tanto más navideño, cálido.
Así lo veo yo.
Esperaba poder borrar las entradas anteriores pero creo que las dejaré ahi, una tras otra de las nuevas espero les remplazen, prometo detenerme un día de estos a leer.
Es bueno estar de vuelta, no sé porque, no importa cuantos blogs me haga, este originó todo.
Game On.
Así lo veo yo.
Esperaba poder borrar las entradas anteriores pero creo que las dejaré ahi, una tras otra de las nuevas espero les remplazen, prometo detenerme un día de estos a leer.
Es bueno estar de vuelta, no sé porque, no importa cuantos blogs me haga, este originó todo.
Game On.
domingo, 18 de septiembre de 2011
NEWS.
Hoola! Heello everyone.
No sé si sera oficialmente pero quería informarles que me he creado una nueva cuenta, un lugar donde empezar desde cero pero digamos que a penas va empezando.
Me encantaría que me ayudaran a darle el visto bueno, quizá lo he comenzado en inglés pero a petición podría quizá, hacer un blog bilingüe (?)
Ojalá gusten acompañarme! Aunque espero igualmente no abandonar este blog.
Les dejo la liga! Los espero por allá!
Igualmente les comparto el link de mi TUMBLR.
¿Alguno tiene TUMBLR? ¡No duden en dejarme su link & me aseguraré de pasarme a mirarlo!
sábado, 18 de junio de 2011
Hollywood Tower Hotel: Welcome to the Twilight Zone.
{Relacionado con el juego temático que se encuentra en los parques Disney,
todos sus derechos junto con los de Twilight Zone.
Tengo miedo. ¿Creeras que tengo miedo?Le tengo miedo a algo que antes esperaba. Antes esperaba una hora de la noche, miraba el cielo en espera del atardecer, que solo anunciaba la llegada de una cosa.
Tu llegada.Mira como me has cambiado, sé que la única manera de olvidarte será recordando lo que era. Lo que hacía. Quien era... pero demonios, ¿quién era yo antes de tu llegada?
Sí algo había olvidado era el miedo y al parecer, lo he recobrado solo que ahora, es un miedo diferente.
Es una mezcla de miedo, de vacio en mi estomago. Algo que vives cuando te lanzan al vacio, como en un juego, cuando incluso aunque sabes que aquel cinturon te sostiene, cuando sabes que al final volverás a tu lugar, sientes ese vacio en tu estomago, donde no existe nada más que una mezcla de emoción, miedo y esperanza.
Cuando se acerca la noche, esa sensación se apodera de mí.
Primero viene el miedo. El nudo en la garganta, el dolor, el sufrimiento. ¿Seré capaz de soportar una noche más donde me ignores? Donde me olvides. Donde dejes muy claro que no existo más en tu memoria, donde sí alguna vez fui parte de tu vida, me has eliminado por completo.
Enseguida viene la emoción. Conforme se acerca la hora, como cuando ves cerrarse las puertas en el juego, donde empiezas a dar marcha atrás, enseguida vendrá el espejismo. El sueño donde espero verte, donde la luz verde este encendida.
Donde creo que algo puede cambiar.Finalmente llega la esperanza. Me lanzan al vacio. Donde el reloj de arena da vueltas y el tiempo del juego comienza, no queda nada más que esperar que me recuerdes, que ese sentimiento persista.
O al menos, que el cansancio se apodere de mi cuerpo y me rinda ante mis sueños; 'No soy flojo, duermo mucho para soñar contigo'
No sé a ciencia cierta si duermo para olvidar o para recordar, al menos por ahora, lo hago para poder sobrevivir a lo que resta de la noche.
Ahí termina el juego y ánimada, fascinada, al bajar, me he vuelto a formar.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)